Decenas de antorchas alumbraban aquel paisaje , prendían fuego a los matorrales y avanzaban tierra adentro , así nos complicarían la entrada en tierra y éramos conscientes de que nos iban a atacar tan pronto consiguieramos atravesar la zona quemada , por lo que nos preparamos con todas las armas y nos dispusimos a acercar los barcos a la costa. Terrible error , el viento comenzó a soplar mas fuerte y arrastró todos los barcos contra la costa , arrasandolos por completo todos , pero , gracias al cielo , no se tuvieron que lamentar víctimas pero todos acabamos en el mar , lo que a algunos les hizo surgir una idea . Al estar completamente mojados corrimos entre el fuego causandonos muchos menos daños que si no estuvieramos empapados en agua, y justo al otro lado encontramos a los que vieramos desde los barcos , que venían hacia nosotros dispuestos a atacarnos , pero no contaban con nuestra ingeniosa idea . Cogimos unos arapos , enredamo...
La curiosidad hace que surjan grandes proyectos y así nació este blog.